Blog

El mundo actual ha cambiado de una forma acelerada, ya sea en lo económico, político, ambiental, social y científico. Y para los docentes, educadores, tutores, cuidadores o especialistas uno de los mayores retos ha sido ¿Cómo crear procesos de formación que respondan a las exigencias del mundo actual?, brindar una respuesta a esta pregunta implica reconfigurar las nuevas tendencias educativas y para lograrlo es indispensable conocer el enfoque STEAM. Una vez reconocido que este enfoque se vuelve necesario responder a la siguiente inquietud ¿Cómo estructurar un proceso sistemático de aprendizaje?, independientemente de la modalidad de aprendizaje la respuesta a esta pregunta está en la correcta selección de un modelo de Diseño Instruccional a partir de lo cual se lograrán los objetivos de aprendizaje. En este articulo vamos a conocer las fases para determinar un DI adecuado que responda a la teoría, metodología, y enfoque de aprendizaje para la educación del futuro. ¡Comencemos! ¿Qué es el Diseño Instruccional? Smith e Ragan lo definieron como: “El proceso sistemático de traducir principios de cognición y aprendizaje para la planificación de materiales didácticos, actividades, fuentes de información y procesos de evaluación”. Por lo tanto, el termino de DI (Diseño instruccional) es utilizado para la ingeniería pedagógica o arquitectura de aprendizaje y a esta se incorporan los métodos, técnicas y recursos que garanticen un proceso de aprendizaje que responda a la educación del siglo XXI. ¿Qué es el enfoque STEAM? Hace referencia a un aprendizaje interdisciplinar de la Ciencia, Tecnología, Ingeniería, Artes y Matemáticas y una estrategia valiosa para que los estudiantes puedan adquirir habilidades propias de la comunidad científica, desarrollen competencias del mundo laboral y que se involucren y toman posturas frente a los retos científico-tecnológicos. Cuando conocemos la conceptualización básica de Diseño Instruccional y enfoque STEAM, conoceremos y aplicaremos cada fase para determinar el modelo de DI. Fase 1: Realizar un diagnóstico para conocer a quien va dirigido el curso es un factor relevante para diseñar en las diferentes modalidades presencial, o virtual contextualizado a las necesidades de los niños, niñas y jóvenes participantes. Para conocer cada uno de los contextos del participante elabora instrumentos para la recolección de datos como son: cuestionarios, entrevistas a profundidad, focus group y análisis de las redes sociales entre otras estrategias de diagnóstico. Fase 2: Para definir los resultados de aprendizaje es necesario determinar el modelo educativo con lo cual se orientarán los procesos de planificación didáctica, ejecución y evaluación. Una correcta planeación va a determinar un correcto diseño de los objetos virtuales de aprendizaje. Por ejemplo, la educación interdisciplinar STEAM ya se encuentra enmarcada en el modelo constructivista o aprendizaje activo, en este modelo se busca que los estudiantes sean garantes de su propio conocimiento a través de la experimentación creativa, el diseño y la elaboración de productos. Fase 3: Las estrategias didácticas se desprenden del modelo educativo seleccionado en la fase 2. Por ejemplo, si el modelo educativo hace referencia al constructivismo, las estrategias didácticas pueden ser las siguientes: estudio de casos, proyectos, obras artísticas, escribir historias, trabajo en equipo, entre otras. Fase 4: Al tener clara la estrategia didáctica, entonces se debe determinar el modelo de diseño instruccional que se define como el proceso de planear y preparar recursos y ecosistemas de aprendizaje (Bruner, 1969). Es importante crear una congruencia entre los modelos didácticos y los modelos y enfoques de diseño instruccional. Fase 5: Las actividades de aprendizaje deben tener claro su objetivo, su redacción debe ser clara, concisa y breve, considerando elementos como la ejemplificación, el rescate de los conocimientos y experiencias previas de los estudiantes y el apoyo de materiales. Por ejemplo: imágenes, videos, infografías. Al seleccionar la actividad es necesario redactar consignas entendibles, objetivos de la actividad, recursos a utilizar y selección adecuada de la herramienta virtual. Fase 6: Es necesario seleccionar los recursos tecnológicos más idóneos. Para ello es recomendable considerar criterios orientados a tres ejes que permitan valorar la calidad de dichos recursos: el pedagógico, el técnico y el funcional. Por ejemplo: lo pedagógico va orientado al nivel de interactividad que pueda brindar la herramientas o plataforma virtual y que permita que los participantes puedan estimular la creatividad e innovación, lo técnico hace referencia a la calidad, adaptabilidad y a generar una excelente experiencia de usuario y lo funcional se relaciona al tipo de accesibilidad a los objetivos virtuales de aprendizaje y si las plataformas seleccionar funcionan correctamente, aportando distintas alternativas y variabilidad de los recursos. El ser humano evoluciona su forma de aprender, la sociedad de la información demanda nuevas habilidades, por ello es indispensable que ustedes profesionales de la educación pongan en práctica estas 6 fases para determinar cuál es el modelo de Diseño Instruccional más adecuado que responda a sus objetivos, metodología y teorías de aprendizaje, teniendo como premisa fundamental el enfoque STEAM y así favorecer la innovación científica, artística y tecnológica basados en un aprendizaje dinámico, activo y autónomo. Cuéntanos en los comentarios cuál es tu motivación para seguir innovando en tu proceso de planificación didáctica y como ha sido tu forma de trabajo pedagógico en la transición hacia las nuevas modalidades y tendencias de enseñanza y aprendizaje. Te invito a investigar y leer más acerca del enfoque STEAM y Diseño Instruccional en las siguientes fuentes de consulta: Enfoque STEAM retos y oportunidades para los docentes Diseño instruccional para la innovación del aprendizaje.